TAXISTAS Y ELECCIONES

TAXISTAS Y ELECCIONES

A estás alturas todos en nuestro gremio ya hemos oído hablar del TTIP, sabemos de las consecuencias posibles de la entrada en vigor de este tratado.
Este acuerdo puede ser el caballo de troya de la competencia desleal y pirata de las grandes empresas y de las grandes corporaciones. Es un torpedo en la línea de flotación de nuestro sector, pero sin embargo, ¿Cuántos compañeros habrán vuelto a votar a partidos políticos que están a favor de este tratado?¿Qué es lo que hace que alguien vote en contra de sus propios intereses?.

Responder a esas preguntas no es fácil, me es muy difícil comprender cómo uno puede dejar de lado la defensa de sus intereses para defender los intereses de otros, intereses que entran en confrontación directa con su bienestar. Quizás, se pueda entender al trabajador precario qué votando a la derecha crea que lo poco que tiene lo va a seguir manteniendo. Pero en el caso de los compañeros taxistas, esto no sirve, ya que no hablamos de votar para mantener lo poco que tenemos, sino que conscientemente votamos sabiendo que corremos un riesgo de perder lo que tenemos . Nuestro modo de vida, tal y como lo entendemos, puede desaparecer de un día para otro, además, ya hemos luchado contra el dragón, UBER ha sido nuestro primer escenario de lucha.

El dragón existe, no es un cuento medieval, lo hemos visto lanzar llamaradas, por suerte, hemos esquivado sus golpes, pero todavía está en la cueva agazapado esperando su momento. ¿Cómo puede ser qué conociendo su existencia todavía haya compañeros que voten a favor de partidos políticos que alimentan a este dragón?
¿ cómo es posible que siendo conscientes de esté mal sigamos actuando de forma contraproducente? Parece como si la planta de la adormidera, el opio, estuviera implantado en nuestro cerebro y nos impidiera actuar de forma lógica. Es cómo si carecieramos de poder cognitivo. Por eso, me parece mas lamentable la actitud de los compañeros que actúan aún conociendo el daño. La ignorancia te puede llevar a apoyar a los que te esclavizan, pero todavía no logro entender qué es lo que te lleva a apoyar con conocimiento de causa a algo que sabes que te va a perjudicar.

Por desgracia, parece que esta misma forma de actuar la trasladamos a todas las partes de nuestra profesión. Llevo bastante tiempo analizando el comportamiento de los compañeros, y lamento tener que decir que es desalentador la actitud de muchos de ellos. Es lamentable ver como tenemos al alcance de nuestra mano el poder hacer de nuestra profesión una profesión más digna y rentable, y sin embargo siempre caemos en los tópicos del taxi, horas, horas, horas y más horas. Anteponemos a nuestra propia familia, a nuestros propios amigos y a nuestro propio enriquecimiento personal una idea equivocada heredada por una concepción trasnochada de lo que es la vida del taxista. Por ello, actuamos incluso conscientemente en contra de nosotros mismos continuamente. Esto sucede porque todavía no nos hemos parado a pensar fríamente qué es lo que estamos haciendo por nuestro futuro.

Si los taxistas fueran dinosaurios votarían a favor del meteorito.

Ximo 1605