EL SILENCIO POR RESPUESTA

EL SILENCIO POR RESPUESTA

Ayer escuché a la Gremial más nerviosa que nunca, el motivo parece ser que hay un borrador de regulación que no se sabe muy bien de dónde ha salido.
Pero quiero centrarme en el discurso de los gremialistas, discurso que a mi modo de ver, está vacío de contenido claro y conciso.

La Gremial se caracteriza por el inmovilismo, y curiosamente este inmovilismo es acompañado de palabras grandilocuentes como «libertad» y «crecimiento», ¿Pero qué es la libertad en nuestro sector?, ¿salir cuando uno quiere y acabar cuando le la gana?¿Entonces se limita al horario?¿La rentabilidad y los clientes no entra en esa «libertad»?¿Se imaginan a un comercio hablando solo de libertad de horario (curiosamente los comercios pequeños hablan de restringir horarios) y no de rentabilidad económica? ¿De qué me sirve esa «libertad» si me paso más tiempo vacío que ocupado?.

Debemos por lo tanto, denunciar la manipulación a través de la palabra y de los eufemismos que encierran mentiras.

Otra palabra muy repetida es la de «crecimiento», vayamos al análisis más concreto de este término. Sí el dinero es el que hay y los clientes son los que son, ¿Podemos crecer TODOS de igual medida?, la respuesta es un NO rotundo, el crecimiento de la gremial es el crecimiento de la desigualdad, ya que saben perfectamente que todos no podríamos ni crecer ni contratar como ellos pretenden. Es el «di lo que yo digo pero no hagas lo que yo hago». Es el canto de sirena para atraer a los ingenuos con las promesas de «sueño americano». Cuando su «libertad» y «crecimiento» solo es para unos pocos deja de ser libertad y crecimiento.

También este pensamiento encierra una doble moral, lo que quieren para dentro del sector no lo quiere para fuera. Los sueños de libertad y crecimiento entran en contradicción cuando estás en contra de la liberalización. Cuando hay posibilidad de que agentes externos entren en nuestro sector ya no hablan ni de libertad ni de crecimiento.

En ciencia, una teoría se sabe válida si es demostrable en todos los escenarios posibles, si en todas las pruebas a la que es sometida la hipótesis sale airosa la teoría es buena. Pero si falla en una sola prueba es desechada, la universalidad es la piedra angular de la veracidad.

Por ello, las ideas liberales de los conservadores se basan en la mentira y en la manipulación, ya que solo sus teorías son realizables para unos pocos, por lo tanto su veracidad no existe porque no existe universalidad. Las ideas de la Gremial por desgracia entran en esta categoría.

Ximo 1605