FEDERACIÓN NO ES UN SINDICATO
Federación Sindical del taxi ya no puede representarme. Lo mínimo que debe garantizar una organización sindical es la lucha por la jornada laboral digna, y esta jornada debe ser de 8 horas. Los autónomos no somos inmunes a la explotación. La gran mentira qué a favorecido la explotación y las jornadas miserables del siglo XIX ha sido la creencia de qué por ser autónomo no estamos atados al mismo régimen de marginación y explotación que el resto de los trabajadores asalariados.
La pérdida de conciencia de clase nos está llevando a que dirigentes que se autoproclaman «apolíticos» lleven las organizaciones sindicales a un callejón sin salida. La falta de ideología, la mediocridad intelectual y el interés particular está fomentando más que nunca la autoexplotación en el sector del taxi.
Pero no podemos dejar de denunciar que los representantes actuales del taxi valenciano no son más que el reflejo de los socios de estas organizaciones. Unos socios que son incapaces de movilizarse por sus propios intereses, ya que el concepto individualista imperante en nuestro sector está consiguiendo desvirtuar la esencia de una organización sindical y por ende la mejora de nuestras condiciones laborales.
Viendo la actitud del propio trabajador autónomo del taxi solo nos puede provocar sonrojo al recordar el sacrificio de pasadas generaciones que incluso dieron su vida para que ahora hoy podamos medio disfrutar una sociedad del bienestar.
Pero es en particular en la Federación Sindical del taxi de Valencia dónde encontramos el mayor desasosiego, esta organización está llevada por una junta qué es incapaz de defender verdaderamente los intereses de sus afiliados. La falta de capacidad está provocando la incoherencia, la contradicción y sobre todo la necesidad de mentir constantemente para mantener a sus acólitos en formación militar.
Es Fernando del Molino la representación máxima de este desorden organizativo. Un supuesto dirigente «sindical» que (abiertamente y sin avergonzarse) dice que sí en el sector hubiera trabajo no haría falta regulaciones. Es decir, que no le importa nada las condiciones laborales de sus socios, ni las jornadas esclavas, ni la perdida de convivencia, ni la conciliación familiar. Es tan absurda su posición que no le importa encabezar la defensa de una jornada laboral de hasta 16 horas diarias. Eso sí, pretende elaborar junto a la administración una nueva Ley de Movilidad, un nuevo reglamento que se ajuste a la necesidad de la mayoría, es decir, a los autónomos.
Pero lo que este señor no sabe, es que da igual la Ley de Movilidad que tengamos mientras sigamos trabajando de forma esclavista de 12 a 16 horas diarias. Mientras estos conceptos básicos no se traten con rigurosidad, da igual quién esté representando a los taxistas.
Por todo ello, Federación no me representa, es más, Federación representa solamente los intereses de Fernando del Molino.
Ximo 1605
No hay comentarios:
Publicar un comentario