MENTIRAS E INTOXICACIÓN
Y «Sí», «a lo mejor», «quizás», «teniendo en cuenta». Así se empieza cuando se argumenta a favor del 12+4, tras comprobar que no da mucho resultado pasan directamente a la mentira, «cómo hay 600 coches doblados», «esta regulación es mejor que el ABC», «Vamos a quitar 500 coches más que ahora».
Es su radio hace tiempo que utilizan la intoxicación como forma de convencer, tienen la desfachatez de decir que tienen estudios económicos, y cuando se le reclama esos estudios se callan y se esconden, acto seguido vuelve a entrar su vocero a tirar balones fuera. En este mismo lugar todo un PRESIDENTE dice que «no hace falta dar explicaciones las 12+4 son mejores que el ABC», a renglón seguido el vocero aplaude hasta fundirse las manos.
El rigor, la evidencia, la prueba e incluso el sentido común no sirve para los personajes del «tu miente que algo queda», se les pilla mintiendo, se le desmienten su afirmaciones con documentos y no son capaces de salir a pedir perdón. Simplemente se callan a expensas que salga el recoge pelotas a volver a tirar balones fuera.
Los unos y los otros salen a limpiar sus letrinas, «yo limpio tu mentiras y tu ocultas mi incapacidad», «yo falsifico y tu escupe veneno para que se entretengan con nuestras mentiras», «yo digo una cifras y tu dices que es así», «yo digo autónomo y tu dices mayoría».
Una estrategia antigua, bochornosa y mentirosa, pero EFICAZ. No hacen falta pruebas, no hacen faltas razones, lo único que tienes que hacer es matar la valentía y la verdad. Te tienes que esconder cuando te inunden de pruebas en contra de tus afirmaciones, ignorar la verdad, esconderla, taparla y aparentar no ser un COBARDE. Luego, salir de tu cubil a escupir mentiras como un Kalasnikov escupe balas, da igual que la mentira sea evidente, di otra mentira para tapar la primera y así, hasta que el olor sea tan nauseabundo que te tengas que alejar para seguir soltando mentiras.
Utiliza argumentos fáciles, «es de cajón», «es evidente», «es muy fácil», «mi cuñado me lo ha dicho». Luego, obliga a los títeres a repetir lo mismo por las paradas, que llamen a otras radios, aunque hagan el ridículo da igual, que repitan que algo quedará.
Cobardes, trepas del sufrimiento, apologistas de la MENTIRA, maestros del engaño, egocéntricos con chapa de plástico.....malas personas.
Ximo 1605
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