miércoles, 13 de abril de 2016

ECONOMÍA COLABORATIVA

ECONOMÍA COLABORATIVA

¿Qué es colaborar?; para un amante de la filosofía liberal es el intercambio de favores basado en el interés propio. Es decir, el egoismo como espoleta que enciende las relaciones sociales. ¿Cuántas veces hemos oído decir qué el hombre es egoísta por naturaleza?, muchas. Pero, ¿Cuántas veces nos hemos parado a pensar sí eso es así?.
Decir que el hombre es egoísta por «naturaleza» encierra una imposición, es decir; un determinismo biológico que hace obligatorio una conducta, ya que está implícito en nuestros genes como debemos comportarnos, no hay alternativa, es genética.
Por tanto, todos deberíamos actuar de igual forma a situaciones y estímulos parecidos, pero eso no es así. Sí fuera así, no existiría el altruismo, la ayuda sin recompensa; el impulso de auxiliar a alguien no se produciría, al menos, que no fuera a cambio de algo. Por tanto, como todos no procedemos de igual manera no deberíamos generalizar una conducta como algo normal, y menos, darle un carácter biológico.
El instinto de supervivencia si que hace que actuemos en defensa de nuestra propia vida, o la de un ser querido. Pero este instinto nada tiene que ver con el deseo y la necesidad de acumular.
El hombre desde sus albores ha tenido la necesidad de relacionarse. Una relación que busca una colaboración para hacer de su vida una existencia más fácil y justa. Los últimos estudios en antropología determinan que el altruismo juega un papel primordial en esa relación. Desechando el egoismo como acicate que obliga al contacto social.
Entonces, ¿Qué hace del hombre un ser egoista?; La relciones sociales. Una conducta aprendida que parte de una sociedad jerarquizada. Dónde se establece una dialéctica entre poseedores y desposeídos, dónde se inculca el hábito de la acumulación por el hecho simplemente de acumular, acción sin sentido práctico de calidad, más, cuándo las necesidades básicas están cubiertas.
La creación de necesidades nuevas que en el fondo no mejora nuestra vida provoca un vacío existencial que se pretende llenar con objetos que el mercado capitalista genera en beneficio explícito de una clase dominante que poseen los modos de producción.
Por tanto, el egoismo es una emoción progamada derivada de la escasez. Emoción que es fomentada y alterada constantemente, haciendo creer al iluso que es normal, ya que racionaliza la emoción volviéndola pauta habitual.
¿Y qué tiene que ver todo esto con la economía colaborativa?, Mucho.
La acción de colaborar es ajena al intercambio monetario, ya que éste se puede acumular, si aparece el papel moneda deja de ser COLABORATIVA. Ya que es simplemente un negocio, una forma de seguir acumulando riqueza.
La economía colaborativa es el intercambio de acciones que busca la mejora de la vida. Acción como uso de la razón o el ejercicio manual de ayuda, también el intercambio de bienes materiales. Pero NUNCA con transferencia monetaria, ya que ésta en cierra un lucro, no un intercambio de favores, que es en esencia lo que tiene que ser la economía colaborativa.

Ximo 1605

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