¿Qué hay detrás del reloj de 16 horas?
Odio al asalariado. Sin más.
Los autoproclamados “defensores del sector y de sus derechos laborales”, pueden disfrazarlo como quieran, darse golpes de pecho en público, sacar banderas y pegadizos eslóganes que solo conseguirán engañar a los más ingenuos o a los que como ellos, ocultan sus verdaderas intenciones. Y si no eres consciente de esa realidad, deberías para un momento y reflexionar.
Si contratas a dos asalariados, ocho horas por chófer y trabajando a porcentaje, el reloj te impide realizar tu jornada de ocho horas en plenitud, ya que éste, te impide almorzar en treinta minutos, ir al servicio con normalidad o hacer el relevo bien hecho sin perder tiempo de trabajo dentro de tu jornada de ocho horas. Y si eres autónomo y contratas, tu derecho a hacer más de ocho horas desaparece, para que tu compañero asalariado pueda hacer su jornada legal de ocho horas.
Luego hay que añadir la modalidad de cobro que tienen los asalariados, el porcentaje les obliga a jugar con las horas para alcanzar los mínimos de recaudación para hacer rentable su contratación y un sueldo mínimo donde está incluido los días de vacaciones, incluyendo reparaciones o accidentes.
Y todos estos inconvenientes hacen que el reloj de 16 horas sea incomodo y en ocasiones inviable a la contratación. Y estos ”salva patrias” del sector lo conocen perfectamente y alientan esta inviabilidad para impedir el trabajo a los compañeros asalariados.
Así, lo que
verdaderamente hay que animar, es a los compañeros asalariados es a organizarse en sindicatos propios del sector para reivindicar mejoras salariales y jornadas laborales dignas. No dejarse engañar por autónomos que solo de forma espuria ocultan sus verdaderas intenciones; que es la desaparición de los chóferes.
Luego me gustaría añadir un tema más; el infantilismo irracional de los más radicales que nos puede llevar a todo lo contrario de lo que supuestamente defienden, como es la liberalización.
Deberíamos partir de una realidad más que evidente; por suerte hay trabajo.
Este hecho no baladí, debería hacernos conscientes de que si exigimos ciertas medidas para restar días de trabajo, (como un ABC en noviembre) nos puede llevar a que esta administración capitaneada por unos ineptos y coaccionada por una extrema derecha más que rancia, a que sus ansían neoliberales arrasen con los derechos conquistados desde hace muchos años.
Llena de quejas la administración por falta de taxis y le darás alas a los fanáticos del mercado libre para hacernos desaparecer como servicio publico regulado. O darás motivos para que todavía más concedan licencias de VTC.
Todo esto en el marco que es evidente que hay trabajo, y que el nivel de trabajo a cada autónomo nos da una libertad para cogernos días extras que antes no podíamos.
Parece que es imposible alcanzar un punto medio que nos beneficie a todos, pero si que lo es, mantener los dos días libres, una semana santa regulada y unas vacaciones en agosto no tiene que estar reñido con la desaparición de un reloj que es inocuo y que jamás ha regulado ni mejorado las condiciones de trabajo de nuestro sector.
Manteniendo los logros alcanzados en días libres y regulaciones, y observando el dato objetivo de que hay trabajo, el reloj no es un avance, es un retroceso.
Hagamos de la recaudación mejorada un avance en derechos que se traduzca en días libres y en menos horas de trabajo. Que cada uno sabe muy bien y ya es mayorcito (hablo de autónomos, evidentemente) para saber como puede llevar mejor la conciliación que siempre le ha faltado a este sector.
Y que si la recaudación (que es la auténtica libertad en el taxi) se merma, volvamos a las regulaciones más restrictivas que nos han dado mayor calidad de vida en los peores momentos.
Pero que es evidente, que podemos alcanzar términos medios que los gurús con su irresponsabilidad parecen no entender. Y que su fanatismo infantil, los hacen incapaces de analizar el sector con ajustada veracidad, impidiendo el análisis objetivo de que lo que nos conviene en cada momento.
Ximo 1605