EL POSTUREO DE LA CARIDAD
Otro año más los dirigentes del taxi valenciano han ido a la casa de la caridad a hacerse fotos mientras donaban alimentos.
Un año más la mentalidad servil de los años 50 se ha paseado por las puertas de esta institución.
Como cada año solo saben hacer el ridículo sin darse cuenta.
Cientos de empresas y particulares donan alimentos sin darse propaganda así mismos. Los actos altruistas lo son si no hay un interés oculto en el hecho mismo, y menos, para inflar egos infantiles.
Y a nadie se le escapa que el taxi como colectivo se presenta ante la sociedad como almas caritativas, y así, de paso, intentar mejorar la imagen de este sector, que es la verdadera intencionalidad.
Si fueran altruistas de verdad, estos dirigentes no pondrían trabas a los asalariados del sector a ejercer el derecho al trabajo en condiciones dignas, tampoco solicitarían regulaciones para mandar a padres y madres al paro, y por tanto, a la misma precariedad que aparentemente quieren aliviar.
Otro año más los cínicos sacan los dientes a modo de sonrisas para que lo pobres que ese día coman pan, se acuerden que es gracias a los taxistas.
Los mismos taxistas que con una mentalidad decimonónica heredado de la hipocresía católica se jactan de sus obras sin cuestionarse ni por un segundo el sistema económico que provoca que exista la caridad.
Hay que ayudar, pero con discurso emancipador, analizando las causas y proponiendo soluciones...y sobretodo, sin darse publicidad como colectivo.
Ximo 1605
